La familia autoritaria

Me preguntaba Kiri cómo iban las cosas en Europa con respecto al papel de la mujer. Es un tema complejo, del cual no dispongo de muchos datos, pero me gustaría aclarar algunas cosas.

Las diferencia principal se da entre los países católicos y los protestantes y la clave es la alfabetización en masa de la mujer. La alfabetización en masa de la mujer se da en Alemania, Paises Bajos y Escandinavia a partir de 1850 y posteriormente se extiende al resto de los países de Europa en círculos concéntricos. No es una alfabetización propiciada por los estados, sino que surge de forma espontánea, con ayuda de la imprenta, y por unas causas ligadas a la estructura familiar de estos países: La familia autoritaria.

En este tipo de familia, desde hace ya muchos siglos, los hombres y las mujeres tienen una importancia igual en que se refiere a la crianza de los hijos, aunque el grado de igualdad varía según la zona. Este sistema familiar, busca, sobre todo, transmitir un capital material o moral intacto a las generaciones siguientes y en ausencia de herederos masculinos el sistema se puede ver truncado. Por eso se educa a las mujeres, para que puedan hacer frente al legado familiar. Este tipo de estructura familiar se rige por la dominación masculina pero no intenta minimizar el rol de la mujer en el sistema cultural.

Así pues, los países protestantes, siempre han sido diferentes en ese terreno, y aunque hubiese grandes diferencias, no eran tan profundas como en los países católicos.

Es cierto que, al menos aparentemente, hoy hay una mayor igualdad, aunque en los sueldos no esté tan claro. Las mujeres ganan hasta un 20% menos que los hombres cumpliendo el mismo trabajo. También está el cambio de apellido al casarse (tomando el apellido del marido), práctica que sigue siendo usual, aunque se puede renunciar expresamente a ella. Las relaciones de pareja sí son mas igualitarias, y los hombres hacen tranquilamente labores del hogar o se ocupan de los niños con toda naturalidad. Pero también hay situaciones no tan claras, porque últimamente está de moda "importar" mujeres de países en desarrollo (con unas ganas de emigrar locas), jóvenes, guapas, y mucho más sumisas (al menos aparentemente), que no exigen tanto como las autóctonas. Tailandesas, rusas, sudamericanas etc. son muy solicitadas.

Pero, por ahora, en la mayoría de los casos, los hombres del norte tienen un comportamiento menos "racial" que los del sur.

Imagen: Fernand Khnopff
Retrato de Marguerite

5 comentarios

[Ericillo - 12 de febrero de 2004 - 18:51]

Ammm, pues ande andarás?¿

[Zahorí - 03 de febrero de 2004 - 22:30]

Hau, Cini. Es una pena que te mudes, ahora estaba muy cachi el diseño, pero en fin, si no hay más remedio. Creo que sé cuál es la nueva dire ;) pero avisa de todos modos.

Suerte con los exámenes y con todo.

[seamos cínicas - 03 de febrero de 2004 - 21:53]

Esstupenda, ya te envío un mail cuando pueda, mañana o pasado, y a Zahorí también para daros mi cambio de dirección. Estoy muy ocupada ahora y no puedo. Nos vemos.

[Esstupenda - 03 de febrero de 2004 - 19:08]

Has cambiado el diseño, queda muy acorde con la pintura de Khnopff, pero veo que no consigues colocar tu logo (y sé que lo has intentado)
Te enseño y tu me enseñas a poner los hipervículos de manera que no se cierre la página, porque en esos viajes que hago de repente me pierdo y no sé volver a casa, jajajajjaj, uso tu blog como casa de referencia.

[Esstupenda - 02 de febrero de 2004 - 14:39]

Antes de eso, ya en el XVI, los luteranos nos hicieron un gran favor a las mujeres, católicas y protestantes, claro, porque ellas empezaron antes.
La libre interpretación de las escrituras alentó que las mujeres aprendieran a leer, en un clima de desarrollo burgués. Era impensable en la misma época en España. Hay un cuadro extraordinario de Nicolas Maes en el que se representa una vieja leyendo (http://www.kfki.hu/~arthp/html/m/maes/) las escrituras, naturalmente, pero la lectura es una herramienta poderosa para el cerebro.
Después la Iglesia Católica se dio cuenta de la importancia del adoctrinamiento ,que no educación, de las niñas como futuras madres y educadoras, y para no ser menos que los herejes luteranos se empezó a ocupar de la educación femenina.

A veces es duro cargar con la historia, y sufrirla.